El partido que Alex Herrera jamás olvidará

El pasado domingo Alex Herrera vivió un encuentro muy especial. Volvía a la que ha sido su casa durante muchos años y lo hacía con el equipo visitante. A pesar de eso debió sentirse como en casa.

Antes del encuentro se debió sentir raro. Se dirigió a los vestuarios visitantes y saltó al terreno de juego para calentar por la bocana de vestuarios por la que no está acostumbrado.

Sin embargo el cariño de la afición se lo tiene ganado y así se lo hicieron notar los seguidores blanquinegros animando y teniendo palabras bonitas para un futbolista que ha demostrado amar los colores del conjunto pacense.

Al saltar al verde, ya para disputar el encuentro, recibió el abrazo y el ánimo de algunos de los fotógrafos a los que ha conocido en sus numerosos partidos en el estadio Nuevo Vivero.

Además la directiva blanquinegra quiso tener un detalle con el futbolista pacense y le regaló una camiseta que mostraba los 204 partidos que ha defendido la elástica del Club Deportivo Badajoz.

Comenzó el partido y como buen profesional se olvidó de que escudo estaba enfrente y desplegó su mejor juego. Fue un puñal en la banda izquierda y demostró que podía haber tenido sitio en este nuevo Badajoz.

Parecía que todo iba a acabar con final feliz para él pero el tanto de Eder en el último minuto dejó a un Alex Herrera más que tocado sobre el terreno de juego. Su Club Deportivo Badajoz había ganado pero ahora se debía a otros colores.

El homenaje al futbolista no acabó ahí. La grada de animación quiso tener un detalle con Herrera y tras el encuentro fue aclamado por ella, dándole una placa conmemorativa de su paso por el club.

Sin duda alguna será un encuentro que Alex Herrera jamás olvidará y aunque ahora defiende la camiseta dombenitense su corazón siempre estará con el Club Deportivo Badajoz.