La Asociación de Lucha Contra el Cáncer se prepara para recibir la Medalla de Extremadura

La AECC (Asociación Española Contra el Cáncer) se fundó el 5 de marzo de 1953 gracias a la solidaridad de José Biosca, un empresario de Lérida, quien conociendo lo que suponía tener cáncer, a través de una mujer a la que recogió haciendo autostop para ver a su hijo enfermo, puso en marcha esta asociación para luchar contra una enfermedad que entonces, en los años 50, era sinónimo de muerte.

Desde entonces la AECC ha ido creciendo y complementando al Sistema Nacional de Salud para mejorar la vida de las personas con cáncer a través del apoyo y acompañamiento, de campaña de información y de financiación de proyectos de investigación. A día de hoy, la AECC es la entidad que más fondos destina a investigar la enfermedad con 30 millones de euros en 161 proyectos de investigación.

Este periódico ha podido conocer un poco más de cerca la labor de esta asociación, gracias a su presidenta Ana Rosas Murillo de la Cueva.

Cuando os dieron la noticia de que recibiríais este galardón, ¿cuáles fueron las primeras impresiones?

Lo primero fue acordarnos de todos los pacientes que lo han superado y  los que se han quedado por el camino. Todas las personas que nos han ayudado a ayudar (socios, voluntarios, profesionales, colaboradores) y también todos los que, con nuestro esfuerzo y la investigación, evitaremos que tengan cáncer o que tengan más posibilidades de sobrevivir.

¿Cuántas personas, tanto pacientes como familiares, acuden a vuestras instalaciones para recibir ayuda?

En toda España, la AECC ha atendido en 2014 a más de 440.000 personas afectadas por la enfermedad, de las cuales 1.500 han sido atendidas en Extremadura.

Supongo que las familias vienen con mucho miedo y dudas, ¿Cómo ayudáis desde la asociación a solventar esto?

Efectivamente, el cáncer es una enfermedad que afecta a toda la familia. La principal duda que plantean es cómo pueden ellos ayudar al familiar enfermo. En la AECC contamos con profesionales que ofrecen todo tipo de recursos a los familiares para solucionar cualquier duda que les surja. Por supuesto, si lo necesitan también cuentan con atención psicológica para afrontar y sobrellevar todo el proceso de cáncer por el que atraviesa el paciente.

Además, me supongo también que habrá numerosos voluntarios en esta asociación, ¿cuántos aproximadamente? ¿Cuál es su labor?

En España la AECC cuenta con más de 18.000 personas voluntarias. En Extremadura son 630 los que ejercen su labor, que va desde apoyar y acompañar a la persona enferma y su familia durante todo el proceso de la enfermedad hasta funciones administrativas, de captación de fondos o de cargos institucionales ya que todos nuestros órganos de gobierno son voluntarios.

Después de que hayan pasado muchos pacientes por esta asociación, ¿qué es lo que de verdad los estimula a seguir adelante y luchar contra el cáncer?

Principalmente saber que hoy en día el cáncer no es sinónimo de muerte, que cada vez hay más casos en los que se supera la enfermedad gracias a la investigación en tratamientos eficaces y a la detección precoz. Pero además aumenta el número de casos en los que, pese a no remitir por completo, la enfermedad se puede cronificar durante años con una calidad de vida adecuada. Con todo esto y con el apoyo de las personas que rodean al paciente, merece la pena luchar.

Y las familias, ¿es importante que tengan una actitud fuerte y positiva de cara a la recuperación del paciente?

El soporte familiar es fundamental no solo para cuidar al paciente y animarle a que colabore con los tratamientos y consejos médicos, sino también para amortiguar el impacto emocional que supone el diagnóstico de cáncer. Es cierto que en ocasiones una actitud positiva y de fortaleza mejora el estado de ánimo del paciente, pero hay veces en las que compartir preocupaciones y sentimientos, respetar silencios o facilitar el llanto y el desahogo, ayuda a afrontar la enfermedad. En definitiva, se trata de que el paciente sepa que si necesita apoyo, lo va a tener.   

Por último Ana, ¿qué mensaje mandaríais a los extremeños?

Un mensaje de gratitud y de compromiso porque gracias a ellos, podemos seguir llevando a cabo nuestra misión. Solo espero que en el futuro sigan junto a nuestra asociación para que logremos, entre todos, hacerle frente al cáncer.