OPINIÓN: Quieren talar la infancia de muchos pacenses
16 de Noviembre de 2018
Tras años de desidia y abandono, la plaza de Santa Marta vuelve a estar de actualidad. La polémica sobre los eucaliptos está devolviendo un poco la vida a un lugar en el que tantos niños se han criado y han aprendido a convivir en el mundo que les rodea.
Para quien todavía no conozca la situación, el Gobierno local del Partido Popular quiere talar unos eucaliptos centenarios, que ya ocupaban el lugar donde se encuentran desde antes de construir la plaza.
Si se talan esos árboles muchas personas, entre las que me incluyo, verían derribada una parte muy importante de su infancia.
Muchos niños y niñas hicimos nuestros primeros amigos alrededor de esos eucaliptos. Jugar al fútbol, al escondite, o al pilla pilla era algunas de nuestras pocas preocupaciones de aquella época.
Además, gracias a esos eucaliptos, muchos pudimos vivir nuestra primera experiencia con la naturaleza. Saber lo que es un árbol, y las partes de él, y como amar y respetar a los animales que viven entre ellos.
Que te pique una abeja, que te duela un poco e ir a ver a tu madre para que esta te diga que eso no es nada, es un momento para conocer que habrá cosas que nos hagan daño, pero hay que hacerse fuerte para superar todos los malos momentos y sin esos eucaliptos, seguramente no hubiera ocurrido o habría pasado más tarde de la cuenta.
Además los troncos y ramas de eucaliptos nos sirvieron a muchos niños para agudizar el ingenio. La cantidad de chozos y armas para “defenderlos” que se habrán hecho entre esos árboles.
Ahora, la falta de mantenimiento ha afeado a esos eucaliptos, que antes brillaron en todo su esplendor y sirvieron a muchas personas para convertirse en lo que son ahora. ¿No será mejor invertir en ellos para devolverles la vida que tuvieron y no destruir una parte tan importante de Badajoz?
Esta experiencia enriquecedora se podría ver truncada para las futuras generaciones que verán un parque totalmente distinto, donde los árboles y la naturaleza, pasarán a un segundo plano, casi inadvertidos.
La idea de devolverle la vida al parque de Santa Marta es del gusto de muchos de los niños que allí nos criamos, aunque habrá algún nostálgico que le guste como esta. Sin embargo mantener la esencia del lugar debería ser prioritario.
Los eucaliptos deben permanecer allí, no solo por el coste de quitarlos, sino por lo que supusieron y supondrán para los miles de niños que han jugado y jugarán en el Parque de Santa Marta.
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