OPINIÓN: La escuela es mucho más. No es sólo enseñar.

Muchísimas gracias de verdad a los señores como Casado que quieren quitarnos a los maestros carga de encima en cuanto a la educación en valores de sus hijos como el pin parental.

¡Ojalá! Ojalá llegasen todos los niños como los suyos 100% libres de cargas familiares, despiertos y descansados, limpios y aseados, educados, solidarios, empáticos, rebosantes de amor por parte de sus familias, llenos de seguridad en sí mismos, con la autoestima por las nubes, desayunados, con ropa y zapatos de su talla, con todo su material escolar y dispuestísimos a aprender (que es lo único que nos toca según vosotros).

Por desgracia, cualquier maestro del MUNDO sabe que eso es imposible. Y aunque los niños de Casado and company vengan así, el de los Martínez no dará ni una en mates porque sus padres se están separando y nadie se lo ha explicado; la de los Rodríguez no querrá hacer educación física y fingirá estar enferma porque se meten con su peso; al de los González le dará vergüenza hablar en voz alta en lengua porque se meten con él si juega con las niñas; y al de los Pérez no lo invitan a jugar porque tiene dos madres y los demás piensan que es raro.

Por eso, por más que se den golpes de pecho que sus hijos son suyos, yo seguiré parando mis clases (igual que tropecientos compañeros) si hay que resolver un conflicto o explicar lo que haga falta, si hay que esperar a que un niño se lave la cara porque ni en su casa se han fijado cómo salía...

Y por cierto, todo este testamento se resumen muy sencillo en que a mi como maestra de 9 a 14 en España, la ley y el interés superior del menor me obligan a actuar como una madre de familia con mis alumnos ante cualquier situación y ahora que estoy a punto de serlo, no me cabe duda de cómo quiero que sea la educación de mis hijos en la escuela: PLURAL.

FIRMADO: María SG