Investigan a un varón de 23 años por un presunto Delito de Maltrato Animal en Badajoz

Los hechos ocurrían el pasado 26 de noviembre cuando una Comunidad de Vecinos del Casco Antiguo -donde reside el propietario del animal- interpuso denuncia en las dependencias de la Jefatura de Policía Local, ya que lloros y lamentos de un perro se producían de forma continuada creando un desasosiego continuo en los vecinos.

El animal, según la denuncia interpuesta, se encontraba de forma continuada en la terraza y cuando llegaba el propietario a altas horas de la tarde, acto seguido se escuchaban lloros, lamentos y chillidos del mismo.

Además presentaba denuncia la Asociación para la Defensa de los Animales (ADANA), personándose como acusación particular.

El propietario del perro fue requerido por la OAC (Oficina de Atención al Ciudadano) de la Policía Local de Badajoz, que instruye el correspondiente atestado para que se personase en las dependencias con el perro y pudiera ser examinado por el Veterinario Municipal. 

El veterinario, en primera inspección, tras visionar las radiografías realizadas al can determinó lesiones en la cabeza y fractura de una de sus patas. El propietario manifestó que se habían producido por un accidente de tráfico y que lo había llevado a un veterinario para su revisión.

Ante estas afirmaciones y debido a la gravedad de las lesiones, se le indicó que tenían que realizarle más pruebas, manifestando que él quería deshacerse del perro ya que no lo podía atender por motivos de trabajo. Debido a esto, se le cede a la protectora ADANA para que asista veterinariamente al perro y se haga cargo de una posible adopción.

Según el informe del veterinario municipal, las lesiones no son compatibles con el atropello de un automóvil, indicando que las de la cabeza son resultado de múltiples traumatismos, descartando casi de forma definitiva que se pudiesen haber producido de forma fortuita.

Como resultado, el propietario fue nuevamente requerido por Policía Local para que explicase las diferentes lesiones del perro, a lo que alegó que las lesiones de las patas se habían producido por accidente de tráfico, pero que las lesiones de la cabeza sí se las podía haber ocasionado él en algún momento de reprimenda por el mal comportamiento del animal. "Vamos, lo que haría cualquiera", mantiene.

Ahora la Autoridad Judicial es conocedora de los hechos por la presunta comisión de un delito por maltrato animal. La Policía Local afirma que "se perseguirá de manera constante y efectiva cualquier clase de maltrato animal poniéndolo en conocimiento de la Autoriadad Judicial si procediese".