El bailarín extremeño Óscar Alonso, en la élite de la danza a nivel mundial

Extremadura 7 Días ha hablado en exclusiva con Óscar Alonso, un bailarín extremeño de danza clásica, que triunfa a nivel mundial.

Óscar Alonso es natural de Badajoz y comenzó su trayectoria profesional con María Montero siendo muy joven. A los 18 años ingresó en el Real Conservatorio Profesional de Danza Marisma, donde comenzó lo que sería una carrera meteórica.

El próximo mes de junio participará en un espectáculo como joven coreógrafo y actualmente trabaja en la ópera de Núremberg.

ENTREVISTA

E7D: ¿Cómo nace tu vocación al baile?

O.A.: Es curioso, esta es una pregunta que nos hacen a todos los bailarines muchas veces en la vida, y cada bailarín tiene una pequeña historia detrás, de por qué empezó a bailar.

Mi vocación surge viendo un reportaje sobre un bailarín que acababa de fallecer y al que hacían un reportaje. Era Rudolf Nureyev, y con solo cinco años, me quedé asombrado al verle saltar y girar. Entonces mi padre me preguntó si me gustaría hacer eso que acababa de ver en la tele, a lo que respondí que "sí", sin siquiera saber muy bien donde me estaba metiendo.

E7D: ¿Qué tal respondió tu familia?

O.A.: Bueno, como ya he dicho antes, fue mi padre quien me motivo a empezar. Y por supuesto por parte de mi madre, quien se sacrificó muchísimo para que yo pudiera ir todos los días a clase, ya que vivíamos lejos del centro.

E7D: ¿Dónde te has formado?

O.A.: Comencé con María Montero en Badajoz, con quien estuve hasta los dieciocho años, y quien me enseño mucho. Ella me dijo que hiciese las pruebas para el Real Conservatorio Profesional de Danza Marisma, donde tras unas pruebas muy exigentes, conseguí entrar y terminar mi formación durante cuatro años más. Allí, con mucho esfuerzo, aprendí y perfeccioné mucho, pues es una de las mejores escuelas de Europa, donde yo no era el único "chico", algo importante.

E7D: El recorrido hasta llegar a formar parte de un elenco es difícil, hay mucha competencia, ¿tienes que trabajar mucho?

O.A.: Sí, es difícil, tienes que estar en el momento y lugar adecuado, ya que cada compañía busca un tipo de bailarín, con una personalidad y un carácter. Como en la vida normal, cada uno somos un individuo y no hay dos iguales, pero sí que hay perfiles muy parecidos, y que encajan en una compañía o en otra. Desde mi experiencia, puedo decir que he tenido que trabajar muy duro, he estado en audiciones en las que éramos más de doscientos chicos y unas trescientas chicas, para seis contratos, pero así no son todas las audiciones, depende de lo importante que sea la compañía. Lo que si se ve en todas las audiciones es que hay un nivel muy bueno en España, y esto ocurre porque la mayoría tenemos que salir por no tener ni siquiera la posibilidad de buscar trabajo en España, ya que las compañías, desgraciadamente, escasean.

E7D: ¿En qué lugares y teatros has llegado a actuar?

O.A.: Bueno empezando por Extremadura, tuve el placer de actuar en el López de Ayala y en el Teatro Romano de Mérida. En Madrid estuve en el Teatro Real, en el teatro de Madrid, en el teatro de la Resad y alguno más que no recuerdo. En París he participado en la ópera de Massi, en Biarritz en la Gare du Midi (Francia), en Suiza en Laussanne, y en Alemania en Chemnitz, Ingoldstadt, y en la opera de Núremberg, donde actualmente trabajo.

E7D: ¿Cómo afecta la crisis actual al mundo de la Danza?

O.A.: Pues podéis imaginar, si han cerrado empresas incluso de alimentación... Se han cerrado muchas compañías de danza en los últimos años, y en las que no han cerrado, han recortado el número de bailarines, con lo que cada vez se hace más difícil encontrar trabajo. Además la danza dentro de un teatro es lo que menos valorado se tiene, primero están los cantantes de ópera, después los músicos, actores y después  nosotros, que aunque llenemos los teatros más que el resto, y tengamos una carrera profesional más corta, tenemos peores condiciones laborales y salarios más bajos. Así que el dicho de "trabajar por amor al arte", si quieres ser bailarín tienes que tenerlo claro, je, je, je.

E7D: ¿Te gustaría volver a España a trabajar?

O.A.: Por supuesto, me encantaría, si existieran oportunidades y compañías como en Alemania, no lo dudaría ni un segundo, y por supuesto, si Goyo Montero dirigiese una compañía en España haría lo posible por seguir bailando bajo su dirección.

E7D: ¿Cómo se ve a Extremadura desde fuera? ¿Echas de menos Badajoz?

O.A.: Poca gente de fuera de España sabe dónde está Extremadura, pero los pocos que la conocen hablan maravillas, todos hablan de la comida y los paisajes.

Badajoz lo echo de menos mucho, aunque vivo en una ciudad muy bonita, cómoda y muy rica culturalmente, la tierra tira, y tantos años fuera de allí empiezan a pesar. Me siento afortunado de hacer lo que me gusta y eso ayuda a hacerlo todo más fácil.

E7D: ¿Cuál es tu meta? ¿A dónde te gustaría llegar?

O.A.: Bueno creo que como todos los bailarines, ser bailarín principal y bailar todos los papeles principales es algo que te propones, algo que solo consiguen algunos. Cuando acabe mi carrera como bailarín empezaré a pensar en lo siguiente, que probablemente sea la enseñanza o la coreografía, pero siempre relacionado con la danza.

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