La Junta rechaza intervenir Acorex
29 de Abril de 2015
La plantilla de Acorex protagonizó el lunes una cadena humana a las puertas de la sede de la planta de Mérida para volver a reclamar públicamente el mantenimiento de los puestos de trabajo y una solución que haga viable el futuro de la agrupación.
Esta protesta coincidía con la importante reunión del Consejo Rector de Acorex al que estaban convocados los gerentes de todas las cooperativas integradas en el grupo para debatir sobre su futuro.
En declaraciones a la prensa, el secretario general de CCOO en Extremadura, Julián Carretero, ha exigido al presidente del Gobierno autonómico, José Antonio Monago, que "se ponga las botas y asuma la responsabilidad real" en el tema de Acorex ya que es "el que ha destrozado" la empresa.
Además, Julián Carretero ha indicado que José Antonio Monago tiene "mucho que decir" en la viabilidad futura de Acorex ya que el presidente de la empresa "ha reconocido públicamente" que se está planteando la intervención jurídica del Gobierno de Extremadura.
Ante esto, el Gobierno de Extremadura manifiesta un "no rotundo" a la intervención de Acorex porque "impide el pago a los agricultores, trabajadores y proveedores", defiente el Ejecutivo en nota de prensa.
"La solución de Acorex está en Acorex", dice la Junta, desde donde añaden que la empresa "cuenta con personas con capacidad y con experiencia para liderar el proyecto que reclama todo el pueblo extremeño, que es un Acorex con 42 cooperativas. En cualquier escenario, ya lo adelantamos, el Gobierno va a defender y a velar porque se proteja el dinero de los agricultores".
"La intervención significa el fin de Acorex", sentencia el Ejecutivo, sin embargo, el proyecto Acorex 42 "garantiza la viabilidad, la independencia, la extremeñidad del grupo y el volumen que permite el mantenimiento de los puestos de trabajo, el cobro de las cosechas por los agricultores, de las nóminas a los trabajadores y de las facturas que se deben a los más de 500 pequeños proveedores".
Acorex 42 es la iniciativa que respaldan además los trabajadores y todos los acreedores de Acorex para refinanciar al grupo. Si se trabaja desde la unión de todas las cooperativas, la solución está garantizada. El Gobierno recuerda que Acorex lleva operando décadas en Extremadura y que actualmente mantiene 32 millones de deuda a bancos y a la Administración y la necesidad de 14,5 millones nuevos para pagar a todos los agricultores, los acreedores y los trabajadores. Y esto último es lo que quedaría garantizado con el Plan Acorex 42.
Por todo ello el Gobierno de Extremadura exige velocidad en las negociaciones ya abiertas y que están produciendo acercamientos en las últimas semanas y desbloqueando asuntos de vital trascendencia para las partes, pero considera que esas negociaciones deben avanzar a más velocidad. Que se olviden ya las disputas internas y se avance en el interés general.
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