Gallardo inicia campaña ante lo que plantea como "un choque entre recortes y esperanza"

El PSOE ha dado inicio a la campaña electoral de cara a unas elecciones que, como ha señalado el candidato socialista, Miguel Ángel Gallardo, "no fueron elegidas por los extremeños, ni siquiera por la señora Guardiola, sino decididas desde el laboratorio político de Feijóo y Tellado". Así, Gallardo manifiesta que esta convocatoria adelantada supone "un intento de usurpar el derecho de los extremeños y las extremeñas a decidir su propio futuro".

El candidato ha abierto su campaña reivindicando que Extremadura "ya se emancipó durante los gobiernos socialistas de Juan Carlos Rodríguez Ibarra y Guillermo Fernández Vara. Frente a ese legado, acusó al Ejecutivo del Partido Popular de haber paralizado la región en los últimos dos años y medio, sin "avances que puedan reconocerse y jugando con la esperanza y el futuro de la ciudadanía".

En su intervención Gallardo ha defendido el trabajo previo de su partido antes del inicio oficial de la campaña, con reuniones con colectivos, asociaciones y organizaciones empresariales para "tomar el pulso" a una Extremadura que, afirma, "solo avanza con gobiernos comprometidos con las políticas públicas". Así, ha subrayado la necesidad de reforzar los servicios públicos, "especialmente la educación y la sanidad", y ha criticado "la privatización encubierta de la educación a través de cheques educativos".

El candidato socialista dedicó parte de su intervención a los jóvenes, asegurando que trabaja para ofrecerles un gobierno “aliado de sus proyectos de vida”, capaz de acompañarlos en sus éxitos y fracasos y de construir "un futuro donde puedan desarrollar su talento en su propia tierra".

En clave electoral, hizo un llamamiento a la movilización durante los quince días de campaña, pidiendo a militantes y simpatizantes que hablen “en mercados, parques, centros de salud o colegios” para animar a votar y “abrir un nuevo tiempo de progreso y dignidad”. Asimismo, aseguró que trabajará “cuatro años en cuerpo y alma” por Extremadura si alcanza la Presidencia.

A modo de conclusión, Gallardo planteó el 21 de diciembre como un choque entre “dos modelos completamente distintos”: uno de “recortes y retrocesos” y otro que representa, dijo, "el progreso, la prosperidad y la esperanza".  Por último, instó a no dejarse llevar por las encuestas, que, manifestó, "solo buscan desmovilizar", y recordó su primera victoria electoral con 28 años "pese al escepticismo". Cerró su intervención apelando a la "fuerza, ilusión y proyecto necesario para ganar las elecciones y garantizar que "nunca más otros decidan por los extremeños".