Consulta qué tiempo podría hacer durante agosto en España

Comienza el mes de agosto y muchos se preguntan cómo podría comportarse en lo meteorológico. Analizamos las previsiones para las próximas semanas.

Tras un mes de julio generalmente cálido en muchas zonas de la península, sobre todo en las regiones del suroeste peninsular donde la persistencia de las altas temperaturas se ha mantenido durante bastantes días seguidos, agosto parece que empieza con calor más llevadero en estos primeros días del mes, pero con tendencia a que vuelvan a subir hasta los 38-40ºC a partir del día 5.

Este nuevo ascenso de las temperaturas en la península se mantendrá a lo largo del próximo fin de semana y hasta el día 10 aproximadamente, dándose las temperaturas más altas en toda la mitad oeste y suroeste peninsular, incluso con máximas por encima de los 40-42ºC algunos días.

Un ascenso térmico que vendrá favorecido por el reforzamiento de la dorsal norteafricana (la masa de aire cálido que afecta a la península Ibérica en verano) y por su desplazamiento hacia el Atlántico, haciendo que se disparen las temperaturas sobre todo en las regiones occidentales.

Sin embargo, es probable que la situación cambie notablemente ya entrada la próxima semana (a partir del 10-12 de agosto), con la retirada de esa masa de aire cálido hacia el sur debido al empuje de una enorme masa de aire frío que, desde el Atlántico Norte, se echaría sobre Europa a través del Reino Unido e Irlanda, para afectar a gran parte del continente en los días siguientes con un descenso generalizado de las temperaturas, como se puede observar en la siguiente animación.

En España, ese descenso sería más evidente en el norte peninsular, aunque también en el resto del país deberíamos notar cómo las temperaturas tienden a bajar respecto a las últimas semanas, no sólo en lo referido a las máximas, sino también a las mínimas, con temperaturas mucho más frescas de madrugada.

-¿Lluvias y tormentas a mediados de mes o en la segunda quincena?

Como muestra el mapa que encabeza la noticia, las previsiones del Centro Europeo (uno de los mejores modelos meteorológicos del mundo) para las próximas semanas anuncian ese tiempo algo más inestable y menos caluroso en la península y, por lo general, en todo el perfil occidental de Europa, algo que ya venía insinuando incluso con anterioridad.

En colores azules se expresa esa tendencia a que las precipitaciones puedan ser mayores a las normales en dichas regiones, lo que nos estaría indicando un tiempo posiblemente marcado por la influencia atlántica, con el acercamiento de masas de aire más frescas y húmedas, así como una mayor probabilidad de precipitaciones, muchas de ellas en forma de chubascos-tormentas dada la época del año.

Como habitualmente comentamos en estas ocasiones, no conviene tomar al pie de la letra estas previsiones a fecha de hoy, pues son mapas muy orientativos que tienden a generalizar demasiado y ni mucho menos nos garantiza que vaya a llover en todas las zonas señaladas en el mapa con color azul.

Si ahora echamos un vistazo al mapa de anomalías de temperatura para esas mismas fechas, éste nos está indicando también un panorama de temperaturas entre normales y algo por debajo de la media para esta época del año, sobre todo en las regiones del centro y oeste peninsular.

Igualmente insistimos en que son señales en el mapa muy generalistas, ya que si finalmente se acaba produciendo una hipotética entrada significativa de aire frío sobre Europa, las anomalías diarias serían aún mayores (por temperaturas inferiores a lo normal) en todo el centro-norte peninsular.

Por contra, se puede observar cómo las temperaturas se dispararían hacia el Mediterráneo y en Europa oriental al producirse ese desalojo de aire frío sobre el oeste europeo, desplzándose la dorsal hacia el este.

Más adelante en el mes de agosto la incertidumbre es muy significativa a partir de mediados del mes y predecir a tan largo plazo es una tarea realmente complicada. Según las previsiones parece que se mantendrían los restos de este patrón más fresco e inestable de lo habitual, pero con tendencia a que las temperaturas vayan recuperándose a lo largo de la segunda mitad de agosto.

En cualquier caso, no se descarta que todavía podamos encontrar algo de inestabilidad residual rondando el norte peninsular que pueda dejar episodios de tormentas y tiempo fresco en algunas zonas del país, pero ésto último ya son suposiciones de lo que suele ocurrir tras un patrón atmosférico del estilo.

En definitiva, lo más significativo de las previsiones para este mes de agosto es ese posible patrón de temperaturas menos calurosas (incluso frescas en el norte peninsular) y posibilidad de precipitaciones hacia mediados del mes. Está por ver si finalmente acaba por darse dicha situación y de qué manera podría afectar a según qué zonas de la península. Estaremos muy pendientes.