Acusan al jefe de la Policía Local de Villafranca de los Barros de abuso de poder

El Sindicato Profesional de Policía Municipal y Estatal (SPPME) Extremadura ha denunciado públicamente lo que considera una "deriva autoritaria, represiva y coercitiva" en el seno de la Policía Local de Villafranca de los Barros. Según el sindicato, el régimen disciplinario se estaría utilizando "como instrumento de castigo y amedrentamiento, bajo la dirección del jefe del cuerpo y con el respaldo del alcalde".

El SPPME señala que "el jefe de la Policía Local, con pleno conocimiento y apoyo del alcalde, ha iniciado expedientes disciplinarios injustificados y desproporcionados contra dos miembros del cuerpo". La organización afirma que estos casos "no son hechos aislados", pues, afirman, "en menos de un año, seis afiliados han recibido expedientes", lo que considera una "estrategia consciente de represión para silenciar la crítica, frenar la acción sindical y sembrar el miedo entre la plantilla".

El sindicato advierte que estas actuaciones atentan contra el derecho fundamental a la libertad sindical, protegido por la Constitución y la normativa laboral vigente. Además, denuncian que "cuando la Agente de la Policía Local denuncia la situación de hostigamiento y persecución que viene sufriendo desde hace muchos meses, se desestima por la propia administración, sin ser oída la denunciante, sin que se adopten medidas de protección y prevención para garantizar que la Agente afectada no continúe expuesta a situaciones que puedan menoscabar su dignidad o integridad psicosocial".

En este sentido, el SPPME critica la gestión del jefe de la Policía Local, al que acusa de "abuso de poder" y señala que el alcalde "en lugar de poner freno a estos desmanes, los avala y legitima, convirtiéndose en corresponsable directo de esta situación". El sindicato asegura que esta política afecta "tanto al clima laboral como a la calidad del servicio público que se presta a la ciudadanía de Villafranca de los Barros".

Finalmente, el SPPME Extremadura ha anunciado que continuará denunciando públicamente estos hechos y defiende que "la Policía Local no puede ser gestionada desde el miedo, la amenaza, la represión y la arbitrariedad".