El volcán todavía puede estar activo durante meses

La erupción del volcán de Cumbre Vieja cumple 82 días desde que comenzase su erupción. Varios parámetros recogidos en los últimos días, indican un descenso de la actividad, pero los científicos informan que es pronto para determinar la finalización del volcán.

Tras la reunión del comité científico, la Dirección Técnica del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Riesgo Volcánico, señaló en rueda de prensa que la lava sigue transcurriendo por la zona central y en dirección a la colada 9. Miguel Ángel Morcuende, director técnico del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca), informó que pese a reducirse los datos registrados sobre la actividad del volcán, todavía no lo ha hecho notablemente como para hablar del final de la erupción.

Según el presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, informó en rueda de prensa que existen “índices científicos que puede hacer pensar” que la erupción podría llegar a su fin antes de que termine el 2021.

Del mismo modo, María José Blanco, portavoz del comité científico del Plan de emergencia volcánica de Canarias, advirtió sobre que la eventual interrupción en la emisión de lava no supone el fin de la erupción del volcán, como sucedió años anteriores con el volcán submarino Tagoro.

Según las mediciones del sistema de satélites europeo Copernicus, las edificaciones destruidas se mantienen en 3.039. En cuanto a la sismicidad, los datos registrados se mantienen bajos. El episodio más significativo ha sido un terremoto de magnitud 3.6 a 37 kilómetros bajo la superficie.

En cuanto al número de evacuados, ha ascendido el pasado jueves a 555 personas, quienes se encuentran alojados en hoteles proporcionados por el Gobierno de Canarias. Según Morcuende, la presencia de gases es el factor principal que mantiene a los vecinos desalojados de sus viviendas, además de la cercanía de las coladas en algunas zonas.

La altura de la nube de cenizas y dióxido de azufre alcanza los 1.700 metros, con orientación hacia el suroeste, lo que favorece la navegación aérea, ya que ha estado perjudicada en las últimas semanas.