Los focos ocultos de la bacteria que puede estar en el agua y ser mortal
Este jueves 18 de septiembre, coincidiendo con el Día Mundial de la Calidad del Agua, la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (ANECPLA) ha lanzado una advertencia clara: garantizar agua en condiciones óptimas no es solo una cuestión medioambiental, sino también un problema de Salud Pública.
La entidad ha puesto el foco en la Legionella, bacteria responsable de la legionelosis, una enfermedad pulmonar grave transmitida por la inhalación de aerosoles contaminados. Aunque no se contagia entre personas, sus brotes han aumentado en España en los últimos años, evidenciando la necesidad de reforzar los controles.
“En demasiadas ocasiones, no somos conscientes de los peligros invisibles que puede esconder el agua que usamos a diario, desde duchas hasta sistemas de refrigeración”, ha señalado Sergio Monge, presidente de ANECPLA, quien ha recordado que la Legionella puede derivar en brotes con consecuencias incluso mortales.
Los principales focos se encuentran en torres de refrigeración, sistemas de agua caliente, spas o fuentes ornamentales, especialmente si carecen de un mantenimiento adecuado. Ahí es donde los técnicos de Sanidad Ambiental desempeñan una labor clave, discreta pero esencial para garantizar la seguridad del agua en espacios públicos y privados.
Con la entrada en vigor del Real Decreto 487/2022, que regula los requisitos sanitarios frente a la Legionella, se ha reforzado el enfoque preventivo. No obstante, ANECPLA insiste en que la normativa por sí sola no basta y reclama más concienciación: “El cumplimiento normativo es esencial, pero no suficiente. Necesitamos que administraciones, empresas y ciudadanía entiendan que el agua no es inocua por defecto”, ha advertido Monge.
El Día Mundial de la Calidad del Agua, promovido por la ONU y otras organizaciones internacionales, recuerda que el acceso a agua limpia es un derecho humano. En países como España, donde este acceso parece garantizado, el desafío está en mantener esa calidad de forma constante y eficaz.
“Cada vez que abrimos un grifo o usamos una ducha en un hotel, damos por hecho que el agua es segura. Y lo es, precisamente, porque hay profesionales trabajando para que así sea”, ha concluido el presidente de ANECPLA.