Nuevos Faroles de Cola de Nuestra Señora de la Consolación de Badajoz

El pasado martes tuvo lugar la presentación de las que serán una de las mejores piezas de orfebrería de la ciudad de Badajoz, los Faroles de Cola del paso de Nuestra Señora de la Consolación.

Son de alpaca plateada y están totalmente cincelados y repujados a mano siguiendo las técnicas de la artesanía y tradición orfebre de la época del Barroco. Son obra de Manuel de los Ríos, uno de los mejores orfebres de la ciudad de Sevilla y de toda la Semana Santa española. Miden 130 centímetros de altura y fueron realizados en el año 1997 para el paso de la Virgen de la Amargura de la población hispalense de Constantina.

Si se consulta la página en Internet de esta orfebrería, aparecen unos muy similares a éstos, los únicos que existen, que se hicieron en plata de ley para el paso del Cautivo de Almería, por lo que podemos decir que son una de las piezas más destacadas salidas de este taller sevillano, junto con otras dos piezas de muy distinto diseño que figuran en destacados pasos de Sevilla y Málaga.

Las piezas destacan, no sólo por su gran tamaño, sino sobre todo por el maravilloso trabajo de cincelado que presentan, con multitud de molduras de distintos motivos, bases con angelitos a modo de guirnaldas y un gran cuerpo central flanqueado por columnas salomónicas con hojitas cinceladas sobre la misma pieza. Sobresale la elegantísima y original cúpula del farol que se remata por un jarro con azucenas, símbolo de la Purísima Concepción de María, nombre de la iglesia en que la Vera Cruz de Badajoz tiene su sede canónica.

La originalidad del diseño, la riqueza de la composición, la altísima calidad del trabajo de repujado y el gran nivel de acabado hacen de estos faroles unas piezas realmente excepcionales que no sólo incrementan el Patrimonio Artístico de la Semana Santa de Badajoz sino el de la propia ciudad.

Para sufragarlos, desde la Hermandad han emprendido una “Campaña Pro-Faroles de Cola del Paso de Nuestra Señora de la Consolación” a través de la venta de papeletas a tan solo 1 euro, para que cualquier persona pueda colaborar y sentir que un pedacito de estos faroles son también algo suyo propio.