OPINIÓN | Ni sin jugar, ni jugando: ¿esto tiene solución?

Son ya varios años desastrosos para el CD Badajoz. La historia de los descensos y malas noticias no hace falta repetirla mil veces, porque ya es conocida casi por todos los aficionados al fútbol de España y tiene que ver con lo extradeportivo: los escándalos en las oficinas.

Y es que los blanquinegros comenzaron la liga con -3 puntos al no poder jugar el primer partido contra el Azuaga porque la FIFA no les permitía inscribir jugadores. Parece surrealista, pero es cierto: uno de los mayores ridículos en la historia reciente. Y hay que decirlo.

Este domingo, por fin, los de Juan Marrero pudieron salir al verde a demostrar lo que saben hacer: jugar al fútbol. Nada más lejos de la realidad. Perdieron 1-0 y siguen colistas en la segunda jornada. Es decir: ni sin jugar, ni jugando.

El partido no fue bueno. No hubo juego, no hubo ideas, no hubo alma. Faltó la garra que se necesita en Tercera Federación para sacar los puntos. Marrero señaló al estado del campo, a las ocasiones falladas y a la falta de calma, pero lo cierto es que las sensaciones fueron muy malas.

La pregunta es: ¿esto tiene solución? El CD Badajoz necesita reaccionar de inmediato si no quiere descolgarse definitivamente de la pelea. Están a nueve puntos de los puestos de arriba y, con el lastre de lo extradeportivo, cada jornada sin ganar pesa como una losa.

Porque al final, lo que se juega en el césped es solo la mitad del problema. La otra mitad está en los despachos, en la gestión, en la desconfianza. Y sin un cambio radical en todo eso, no habrá entrenador, ni fichajes, ni milagros que levanten al CD Badajoz.

El fútbol es cruel: quien se rinde, desaparece. Y ahora mismo, lo que se percibe es que este club histórico no solo está perdiendo partidos… está perdiendo el alma.