España luchará por el oro en el Mundial de baloncesto tras dos agónicas prórrogas

Tras dos prórrogas agónicas España estará en la final del Mundial de Baloncesto, que se está celebrando en China. Lo ha conseguido tras superar a una aguerrida Australia, por 95 – 88, que le puso contra las cuerdas.

El partido comenzó con un ritmo frenético por parte de España que pronto cogió una ventaja de cinco puntos en el marcador. Sin embargo rápido reaccionaron los australianos para bajar esa diferencia de uno.

Fue entonces cuando apareció Juancho Hernangómez para con dos triples ampliar de nuevo la ventaja española, pero los rivales volvieron a reaccionar e incluso en algunos compases del juego se pusieron por delante.

Una defensa férrea y varios triples errados hacían que España no pudiera separarse en el marcador. Esto lo aprovecharon los australianos para a falta de un minuto ponerse por delante en el marcador.

Sin embargo apareció Sergio Llull para anotar un triple en el último segundo, aprovechando una posesión de cinco segundos, para acabar el primer cuarto con una ventaja de 22 – 21 en el marcador.

En el segundo cuarto pronto se puso Australia por delante en el marcador y aprovechó los fallos incesantes de España en ataque para poner tierra de por medio en el luminoso.

Patty Mills estaba haciendo mucho daño a la defensa de Sergio Scariollo, que no sabían como frenar al jugador y no lograban cerrar el rebote para evitar las segundas oportunidades.

Hubo que esperar algo más de cuatro minutos para que España anotará su primera canasta en el cuarto. Fue obra de Ricky Rubio, al que los australianos vigilaban muy de cerca para evitar que dirigiera el ataque español.

Con el paso de los minutos la defensa hispana pareció entonarse un poco pero seguía fallando el ataque. Con el resultado de 32 – 37 a favor de Australia se llegaría al final del segundo cuarto.

SEGUNDO TIEMPO

En el inicio del tercer cuarto España seguía atacada en ataque y Patty Mills imponía su ley para aumentar la distancia en el marcador a más de 10 puntos. Por su parte Scariollo pedía paciencia en ataque a los suyos y tan solo un arreón de Marc Gasol evitó que los hispanos se marchasen del partido.

Tras un tiempo muerto que pidió el seleccionador nacional pareció que España mejoraba en defensa y poco a poco fueron bajando la diferencia en el marcador, hasta colocar el luminoso en 51 – 55 al final del tercer cuarto.

En la tónica de todo el encuentro, en el inicio del último cuarto los españoles no eran capaces de cerrar el rebote y esto propició que los australianos consiguieran una renta de ocho puntos.

Sin embargo de nuevo Marc Gasol se echó el equipo a la espalda y a falta de ocho segundos para finalizar la contienda le daba la vuelta al marcador con dos tiros libres.

Sin embargo Mills anotó otro tiro libre poniendo las tablas en el marcador, forzando una prórroga. Por delante tenían los dos equipos cinco minutos para conseguir el pase a la final.

PRÓRROGA

En el inicio de la prórroga fue España quien se adelantó en el marcador, aunque Sergio Scariollo no se mostraba muy conforme con las decisiones arbitrales, que lastraban mucho el ataque español.

Sin embargo la reacción australiana no se hizo esperar y ponían el iguales a 78 a falta de tres minutos. Los ataques parecían imponerse a las defensas.

Sin embargo esto cambio y tras más de dos minutos sin anotar, por parte de ningún equipo, sería Mills quien volvería a adelantar a los australianos desde la línea de los tiros libres. Faltaban cuatro segundos cuando Gasol volvió a empatar la contienda y forzar la segunda prórroga.

Fue cuando llegó el vendaval de España. Australia no sabía como defender el empuje de los españoles. Gasol en la pintura y Llull desde el perímetro daban alas a una selección española que conseguía una renta más que suficiente para hacerse con el triunfo y pasar a la gran final del Mundial.