La Unión avisa: “Extremadura puede perder 100 M€ por inconcreciones de la Consejería de Agricultura”

El 1 de marzo de 2023 se debería haber podido empezar a confeccionar las solicitudes de ayudas de la PAC, así lo establecen tanto la normativa Comunitaria como el artículo 108.2 del Real Decreto 1048/2022, este plazo se prolonga hasta el 31  de mayo, por lo que los agricultores tienen 3 meses para poder confeccionar las solicitudes.

Cuando está acabando el mes de marzo, en Extremadura aún no está completamente operativa la aplicación informática, por lo que hasta la fecha no se ha podido registrar ni una sola solicitud única perfectamente complementada “porque cada semana nos comunican modificaciones en el programa informático con nuevos requisitos y, por tanto, todo lo registrado anteriormente se tiene que volver a revisar y modificar”, advierte La Unión.

“Los agricultores y ganaderos extremeños nos jugamos en esta convocatoria más de 500 millones de € que en estos momentos están amenazados de no poder recibirlos por el exceso de burocracia, de requisitos absurdos y de una gestión incompetente de la Consejería de Agricultura”.

Además de ser un lío burocrático, critican la falta de concreción de los requisitos para acceder a los ecorregímenes, “y si no se remedia esta negligencia en Extremadura el sector agrario pueda perder más de 100 millones de € por no ser solicitados o no cumplir unos requisitos que al día de hoy no están nada claros”.

Aparte de estas posibles pérdidas, “más de 5.000 hectáreas de leguminosas que se han sembrado por exigencia de las normas absurdas de la PAC, se van a destruir por haberse sembrado en tierras no aptas para este cultivo, pero exigidas por la normativa, por lo que en vez de suministrar al mercado proteínas vegetales lo que se ha conseguido es gastar más de 400.000 kilogramos de estas semillas y encarecer aún más el pienso de alimentación animal”.

La Unión exige a la consejera de Agricultura que se clarifiquen las normas para acceder a las ayudas, que la aplicación informática para cumplimentar las solicitudes esté ya operativa, que se modifiquen las normas absurdas de cultivo y que en definitiva la Consejería de Agricultura suponga una ayuda para los agricultores y no un lastre como es en la actualidad.