"Hasta que las matemáticas digan lo contrario"

La derrota contra la Gimnástica Segoviana condena al CD Badajoz a no tener margen de error en las jornadas que restan de temporada. El club blanquinegro se encuentra a seis puntos del playout a falta de jugarse los últimos cuatro partidos. Estará obligado no solo a ganar, sino también a mirar a sus rivales, necesitando que se dejen puntos por el camino.

Luis Oliver, entrenador del equipo pacense, ha lamentado una serie de “cosas inexplicables” que han provocado la derrota del CD Badajoz: “Los balones en el área nos van a la mano y los disparos al palo del rival van dentro”. Asegura el técnico que “al final ya no sabes cómo explicártelo”.

La mala suerte es, para Oliver, una de las razones principales de la debacle pacense, reconoce que “hacemos lo que podemos, pero no hay nada que nos salga a derechas y hay que reconocerlo”.

De cara a la recta final, apunta que las posibilidades de salvar la categoría “no son muchas porque evidentemente ya no dependes de ti”. Para el míster, se necesita “que los que están delante hagan un punto, dos, o a lo sumo seis; y nosotros ganarlo todo”. Sin embargo, recuerda Oliver que “no es imposible, porque este equipo en el último mes le ha competido a todo el mundo y ha tenido posibilidades de ganar todos los partidos”.

Quedarán estas cuatro jornadas para decidir el destino del CD Badajoz: dos contra equipos ya descendidos, una ante un UD Sanse luchando por la cabeza del grupo fuera de casa y una última cita frente al AD Llerenense que ocupa, ahora mismo, el puesto de playout. Solo queda “seguir apretando y seguir yendo a muerte en cada partido” hasta que “las matemáticas digan lo contrario”.