Sencillo truco para acabar con las llamadas spam

Las llamadas telefónicas se han convertido en los últimos años en una amenaza más para nuestra ciberseguridad. Aunque aparentemente detrás de una conversación por teléfono no puede haber ningún peligro, los ciberdelincuentes ya han demostrado su ingenio para sacar partida de ellas.

Para evitar este peligro, podemos acudir al método LAP, que consiste en tres premisas:

Localización: antes de coger la llamada hay que fijarse en el prefijo de esta para saber su ubicación. Todo lo que no sea +34 significa que no es de España, y si no tienes a nadie fuera del país, podría significar que se trata de un engaño.

Autor: si bien la llamada es de un número desconocido, cuando se coge se debe averiguar de quién se trata. Si, por un lado, dice ser una persona conocida, hay que preguntar algo que solo esa persona podría saber. En el caso de ser una entidad o persona con la que no se tiene nada que ver, lo mejor es colgar de inmediato.

Propósito:  la clave para no caer en estafas es llevar la iniciativa y saber cuánto antes qué quieren con dicha llamada. Hay que preguntar sin reparo y, si el motivo no convence o suena raro colgar de inmediato.

La Policía recomienda utilizar el método Localización, Autor y Propósito (LAP, por sus siglas) siempre que nos entre una llamada de un número desconocido.